“Vinicius es un titular, aunque no haya empezado los dos primeros partidos“. Las palabras de Carlo Ancelotti en la vspera del partido en el Villamarn hacan intuir un cambio en la vanguardia del Madrid que se confirm a una hora del inicio del duelo. ‘Vinichus‘, como le llama el tcnico italiano, empezaba en el ataque del Madrid en Sevilla junto a Benzema y Bale. Nada de experimentos ni posiciones antinaturales. Carletto sentaba a Eden Hazard para poner a Vini es su sitio, la banda izquierda del ataque blanco.
El futbolista se empe en cargar de razones a su tcnico. Potenciada su confianza por los tres goles en los dos primeros partidos de Liga, en ambos casos saliendo desde el banquillo (55 minutos en total), Vini fue de nuevo el mejor jugador del ataque madridista en Helipolis. A aos luz de un Gareth Bale que ha vuelto a la apata y abulia de tiempos no tan lejanos, en contraposicin a la buena actitud que demostr en el debut liguero de los blancos en Vitoria. Y por encima incluso de un Benzema que tuvo ms pelea de la aconsejable con los jueces de lnea de Hernndez Hernndez, que le cazaron varias veces en situacin irregular.
La ms clara de Karim fue, precisamente, tras una gran accin por banda izquierda de Vini, una percusin llena de potencia y coronada con la pausa necesaria para levantar la cabeza y ponerla a la llegada de Benzema desde la segunda lnea. El disparo con el interior del ‘9’ se fue lamiendo el palo izquierdo de Rui Silva.
Vini fue de largo el mejor del ataque blanco en Sevilla. Provoc dos tarjetas y mostr siempre desborde, potencia y verticalidad, virtudes que el ataque del Madrid, que tiende a la horizontalidad, necesita como el comer. Y volvi a estar en la base de la jugada que decidi el partido, un desmarque profundo al espacio que le permiti, por los pelos, habilitar atrs a Benzema, cuyo pase templado fue cruzado de forma inapelable a la red por Dani Carvajal.
Tras los 55 minutos de los dos primeros duelos, Vini se fue por encima de los 70 en el Villamarn. Fue el suyo un cambio poltico, porque Hazard tiene un estatus en la plantilla que seguramente o se ajusta a su rendimiento con la camiseta blanca, pero lo cierto es que el brasileo est, en estos momentos, muy por encima del belga. Sin duda a los ojos de los aficionados, que siempre han sentido una conexin especial con un futbolista que lleg al Madrid siendo apenas un nio y que ha tenido que pasar por todo tipo de circunstancias adversas para tratar de ser importante en el club blanco. Y, quiz tambin, en las preferencias de Ancelotti, que en Sevilla no tuvo dudas y eligi a Vini, ayer doblemente titular.
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