Pens que no tena fuerza para seguir liderando el equipo”, contaba aos despus Diego Pablo Simeone rememorando el que ha sido el golpe ms duro en sus casi 10 aos en el Atltico. Hablamos, claro, de una final de Champion, la de Miln, ciudad a la que regresa con los rojiblancos un lustro despus.

Vuelve ms fuerte y como campen de Liga, su segunda tras la de 2014. Pero bien pudo ser el abrupto final de un tcnico que nunca termin de digerir lo que pas sobre el verde de San Siro. Aquel empate a uno, aquel penalti fallado por Griezmann, aquella prrroga y aquellos malditos penaltis para el argentino fueron un palo que le hicieron pensarse seriamente en acabar su etapa como rojiblanco.

Durante semanas medit con sus ms ntimos que su carrera tomara otro rumbo lejos del equipo al que haba llevado a dos de sus tres finales de Copa de Europa. La crueldad de perder ambas llev al argentino a meditar por primera y nica vez su salida de un Atltico que, por suerte para los rojiblancos, no termin de producirse.

Pero se lo pens, vaya si se lo pens. Tanto como para que Miguel ngel Gil y Andrea Berta tuvieran que marcharse a Buenos Aires, donde El Cholo estaba de vacaciones, para terminar de convencer al argentino de que todava tenan muchas gestas qu escribir. Lo lograron, dieron el empujn definitivo a Simeone y este renov recientemente hasta 2024.

Sin rastro de 2016

Pero que aquella final est presente todava queda claro con el viaje organizado para este encuentro ante el Milan. Cambio de hotel, del Meli al Sheraton San Siro. Apenas 4,5 km separan a ambos pero para un cuerpo tcnico supersticioso un mundo para olvidar su da ms difcil.

Tambin se ha cambiado el modus habitual de viaje. Entreno y rueda de prensa ayer en Madrid para viajar a la ciudad del norte de Italia ayer a las 18 horas. Poco ms de 26 horas estarn los de Simeone en una ciudad donde bien pudo acabar su triunfal etapa como tcnico del Atltico.