Apenas un ao ha durado el sueo de Miralem Pjanic de jugar en el Bara. Aunque siendo ms precisos, se apag mucho antes, virado en pesadilla casi desde las primeras semanas. El jugador que mont una fiesta con amigos y familiares para celebrar su fichaje por el Bara y en la que no pudo contener las lgrimas se marcha 13 meses despus todava preguntndose qu ha hecho l para merecerse esto. En un ao, cosas del mercado, ha pasado de la Juve a vestir de azulgrana y jugar con Messi… para acabar en el Besiktas.

Ya lleg con cierto retraso por ser positivo en Covid. Pero Koeman nunca le vio un futbolista para su Bara. No le convenca en aquel doble pivote con el que arranc el curso (De Jong-Busquets), ni tampoco de interior, ni siquiera casi como sustituto de Busi cuando pas el 4-3-3. Solo les aline juntos contra el Dinamo de Kiev, el Ferencvaros y el Betis. Al principio caus extraeza. Hasta Messi lo habl con l, sorprendido por su escasa participacin. Ya en octubre Pjanic alz la voz: “Estoy aqu para jugar”.. La cosa no cambi y fue un poco ms all: “No entiendo esta situacin”, se quej en diciembre.

Pjanic: “Siempre quiero jugar y espero que sea as en el futuro”

Si bien en Champions fue titular en la fase de grupos, el cambio de ao acentu su cada de los planes de Koeman. Todo fue a peor. Slo tres titularidades en 2021 (Cornell, Athletic y Elche, quitado al descanso), con una serie de 10 jornadas seguidas siendo suplente sin jugar, a pesar de los cinco cambios. Ya no haba dudas de que si Koeman continuaba en el cargo, Miralem parta en desventaja. El casting para el banquillo acab donde empez y el ‘8’ se fue haciendo a la idea de que quizs tendra que renunciar al sueo de triunfar en el Bara.

La fiesta de celebracin de Pjanic de su fichaje por el Bara: camisetas blaugranas y llorando emoci

El club, ahogado tambin en lo econmico, le ofreci la carta de libertad hace unas semanas. De solucin a problema, siempre con los nmeros por delante de la pizarra. Porque el trueque con Arthur del ao pasado naci de la necesidad de cuadrar balances en Can Bara y en Turn. Fue un baln de oxgeno, hoy confirmado como pan para hoy y hambre para maana.

Pjanic no quiso hacer un Umtiti y s prioriz jugar antes que agarrarse al contrato. Ejemplar en su comportamiento, reconocido por presidente y entrenador, lgicamente al tratarse de un jugador de su estatus que no se sali del carril ni cuando le adelant un nio como Nico Gonzlez, nunca quiso ser un problema. Se va con una de las grandes espinas de su carrera, la de no haber podido demostrar el futbolista que es en el equipo en el que siempre quiso jugar y al que estuvo esperando tantos aos. Miralem s prefiri el Bara al PSG, pero todo lo que pudo salir mal, sali mal. Con el tiempo contar su versin… y seguramente no habr buenas palabras para Koeman… ni para el club.

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