Una actuación completa, en todos los sentidos de la palabra. Es la definición perfecta para lo que ocurrió con el receptor debutante de los New York Giants, Kadarius Toney, en su partido ante los Dallas Cowboys. Batió un récord, fue la gran sensación, pero terminó expulsado tras agredir a un defensor rival.

Toney desembarcó en la NFL tras ser uno de los mejores de su clase de Draft. Elegido en el puesto 20, tras una gran campaña en la Universidad de Florida junto al ‘quarterback‘ Kyle Trask. Llegaba a los remozados Giants, y ha tardado muy pocos minutos en causar una gran impresión.

En su cuarto partido se enfrentó a los Dallas Cowboys y ha demostrado por qué tiene tanto futuro. Recorrió un total de 189 yardas con 10 pases completados de 13 en los que fue objetivo. Todo un récord para su franquicia como debutante, pues bate las yardas registradas por Odell Beckham Jr. en su primera temporada en un solo encuentro (185).

La locura de Toney

Las buenas sensaciones de Toney tuvieron una sombra importante. En el cuarto y último periodo de partido fue expulsado. Agredió al safety de Dallas, Damontae Kazee, y fue inmediatamente sancionado. No se conoce un motivo, y puede ser fruto de la desesperación por el marcador en contra. La NFL le sancionará con casi total seguridad.

Sus Giants siguen naufragando en la temporada. La derrota ante Cowboys era previsible, pero se han sumado tres contratiempos importantes: Saquon Barkley, ‘runningback‘ y estrella sufrió una lesión de tobillo, Golladay, receptor estrella, de rodilla, y Daniel Jones, ‘quarterback‘, se tuvo que retirar por el protocolo de conmociones.

Así, Toney es la única noticia positiva. Aunque también es negativa viendo su expulsión. Los Giants siguen irregulares y pueden estar otro curso más sin pisar la post-temporada de la NFL. La ‘Gran Manzana‘ está contra las cuerdas.

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