Verano muy intenso, como es habitual cada temporada por estas fechas, el que estamos viviendo en la LEB Oro. Fichajes, renovaciones, cambios de jugadores dentro de los equipos en la misma liga, salidas de jugadores al extranjero… Se presenta una temporada 2021/2022 apasionante y, a priori, muy divertida, con esa vuelta a la normalidad del grupo único tras la experiencia de los dos grupos de la pasada 2020/2021, algo que no dejó indiferente a nadie. El descenso de Estudiantes (que jugará por primera vez en su historia en la categoría de plata del básquet español) y la vuelta de un GBC con aires renovados (a buen seguro se mostrará batallador) darán a la competición un mayor atractivo si cabe, sobre todo para los que no la seguían y puedan engancharse o descubrirla por primera vez.
Pero no es “oro todo lo que reluce”. Y es que lamentablemente, aunque sea ley de vida y algún día tenga que ocurrir, a lo largo del presente verano estamos viendo como una buena parte de los viejos roqueros nacionales de la categoría nos dicen adiós definitivamente con su retirada del baloncesto profesional a su más alto nivel. Así, vimos de repente como varios nombres históricos en la liga y con un gran legado como David Navarro, los hermanos Úriz (Ricardo y Mikel), Rafa Huertas, Iñaki Narros, Salva Arco, Urko Otegi o Miki Feliu, el último caso, han decidido colgar las zapatillas y afrontar nuevos retos en sus vidas profesionales más allá del baloncesto. Las razones han sido diversas, en buena parte de los casos ya que su vida como baloncestista ha llegado a su fin, la edad no perdona y ellos son los primeros conscientes de ello. En algún que otro caso, las malditas lesiones y, por qué no decirlo, la falta de oportunidades o el recelo de los equipos a apostar por jugadores que han demostrado sobradamente su calidad y experiencia en la liga. En cualquier caso, a los que llevamos siguiendo muchos años la LEB Oro, como es el caso de un servidor, que lleva enganchado desde la 2006/2007, sólo nos queda DARLES LAS GRACIAS y APLAUDIRLES con mayúsculas por todo lo que nos han hecho disfrutar como aficionados durante tantos años. Como decía, es ley de vida, pero sin duda que la categoría no volverá a ser lo mismo. Eso sí, todavía nos quedan algunos veteranos de guerra que seguro nos seguirán deleitando (Dani Rodríguez, Marc Blanch, Óliver Arteaga, Albert Sàbat o un Alberto Ruiz de Galarreta al que podremos seguir disfrutando en LEB Plata). Cuando decidan dar el paso de la retirada, es probable que la lista del presente artículo pueda verse modificada. Pero siguen en activo.
El motivo de este artículo es hacer una pequeña recopilación de jugadores (nacionales y extranjeros) que pasarían a conformar nuestro particular Salón de la Fama de la LEB Oro, ya sea por su entrega, dedicación, años en la categoría, títulos conseguidos, poso dejado en el club y/o afición a lo largo de todos sus años… He elegido un total de 10 jugadores (cinco nacionales y cinco extranjeros) que me cuadrarían de lleno, pudiendo ser galardonados con ese hipotético premio de entrar en ese Salón de la Fama. No he tenido en cuenta a ex jugadores que están actualmente desempeñando tareas de entrenador jefe en un club profesional (por ejemplo, un Pedro Rivero que sería un serio candidato a copar el TOP5).
Parto de la base de que la lista es una valoración muy subjetiva y que habrá muchos jugadores que se vayan a quedar fuera, mereciéndolo incluso más que los reflejados y con unas carreras importantes en la liga. Lógicamente todos no caben, pero toca elegir y mojarse. Así como en algún caso premiar a jugadores con mucha trayectoria pero poco palmarés. Afortunadamente muchos son los nombres de nacionales/extranjeros que han pasado por la liga durante todos estos años de seguimiento. Vamos con ello.
Salón de la Fama (nacionales)
Se quedan fuera de la lista nombres como David Gil, Jordi Trias, Iker Urreizti, Salva Arco, los hermanos Úriz, Rafa Huertas, Alejandro Alba, Juanjo Bernabé y Jesús Chagoyen, entre otros (desde luego no por falta de méritos, tremendas carreras…). A continuación os dejo mi TOP5 de nacionales (como cada uno tendrá su clasificación particular, os dejo a vosotros la colocación en orden de “peor” a “mejor”; además, sería injusto poner más arriba o más abajo a tales leyendas de la liga). Todos han hecho méritos suficientes para estar aquí, ya sea en quinto lugar o en el primero.
Jorge García
16 temporadas en Oro
512 partidos, 11.668 minutos, 4.968 puntos, 1.992 rebotes, 4.428 créditos de valoración
El ala-pívot cordobés es una leyenda viva de la competición. Disputó 16 temporadas en LEB Oro, siendo, junto a Miki Feliu, el jugador retirado con más temporadas disputadas. De todos los jugadores Hall of Fame que figuran en esta lista es el único que vivió el inicio y creación de la liga LEB allá por la 1996/1997, debutando esa campaña con el equipo de su tierra (Cajasur). Y es que sus primeras acciones en la categoría datan de esa edición, cuando se creaba la segunda categoría del baloncesto español tal y como la conocemos hoy en día. Burgos (ya sea con Atapuerca, Tizona o Miraflores), donde estuvo cuatro temporadas, así como en el extinto Lucentum Alicante (tres temporadas) marcaron su etapa como jugador, logrando sus mayores éxitos. No era un jugador precisamente que destacara en las estadísticas, pero su trabajo en equipo era prolífico y la capacidad de superación y rendir muchos años seguidos al más alto nivel, digno de alabar. Jugador de equipo. A nivel individual, tener a Jorge García en tu plantilla suponía tener un seguro a la hora de que tu equipo ascendiera (apodado como el rey de los ascensos). Y es que el interior andaluz suma nada menos que 8 ascensos a la ACB en su palmarés. De hecho, ningún jugador en la historia de la LEB Oro ha conseguido tantos ascensos a la máxima categoría. En la 1999/2000 cayó el primero con Lucentum Alicante y, a partir de entonces, los demás fueron llegando en cascada. En la 2003/2004 sumaría el segundo con Bilbao Basket. Una campaña después (2004/2005), el tercero en su carrera y segundo con Alicante, llegando en la 2008/2009 el cuarto (el tercero con Lucentum). Entonces comenzó su maravillosa etapa en Burgos (Ford Burgos), con tres ascensos seguidos en tres ediciones consecutivas, siendo cuatro en total en esa etapa de cinco años. En la 2012/2013, 2013/2014 y la 2014/2015 alcanzaba su quinto, sexto y séptimo ascenso para cerrar su legendaria carrera con un octavo ascenso en la 2016/2017 y en San Pablo Burgos. Aunque como decía no era un jugador de estadísticas, en los diferentes rankings de LEB Oro, no podía ser de otro modo, tiene un papel muy destacado. Es el tercer jugador en partidos jugados (512 encuentros), tan sólo por detrás de Miki Feliu y de Urko Otegi. Segundo máximo anotador de la competición con 4.968 puntos anotados, sólo superado por Richi Guillén. Pero también figura en el TOP10 de rebotes totales capturados (4º con 1.992). Un ejemplo en todo.
Urko Otegi
14 temporadas en Oro
542 partidos, 11.406 minutos, 4.832 puntos, 2.752 rebotes, 6.174 créditos de valoración
Si hablamos de leyendas, no podía faltar. El ala-pívot donostiarra es un caso único e irrepetible en la historia de la liga. Difícil encontrar un jugador que englobe más carisma, pundonor, garra, lucha y entrega en los diferentes equipos por los que ha pasado defendiendo su camiseta. Allá donde jugó dejó una huella imborrable, así como un lugar difícil de reemplazar por todo lo que significaba su figura y cómo influía siempre para bien en el resto de sus compañeros. Un auténtico LÍDER con mayúsculas tanto dentro como fuera de la pista. Jugó un total de 14 temporadas en Oro, pero está claro que hay dos ciudades que están grabadas a fuego en su corazón (más allá de su Donostia natal): hablamos sin duda de Menorca y Palencia, me atrevería a decir que prácticamente al 50%. En estas ciudades vivió sus mejores años como baloncestista, forjando su divina carrera profesional y siendo a buen seguro el jugador más importante en la historia de dichos clubes. En la 2002/2003 comenzaba con el extinto Menorca Bàsquet su andadura en la categoría para acumular años después éxitos tras éxitos. En Palencia disputó siete temporadas consecutivas en Oro (estando nueve en total en dicho club, si sumamos sus dos campañas en Liga EBA cuando se arrancaba a dar sus primeros pasos como profesional). Recibirá un merecido homenaje en tierras palentinas y su eterno dorsal 10 colgará seguro del pabellón morado de aquí a no demasiado tiempo. Un auténtico icono para la ciudad castellana, habiendo sido entre otras cosas pregonero de las fiestas en el 2019. Algo similar ocurre en tierras menorquinas: estuvo siete temporadas (cinco con el extinto Menorca Bàsquet en Oro y dos con el joven proyecto del Bàsquet Menorca en Plata), siendo también un icono para la isla, así como un gran referente obteniendo (tres ascensos). Apodado Míster LEB Oro tras su logro de partidos disputados, tiene en sus vitrinas un total de cinco ascensos a la ACB en su palmarés. El primero llegó en la 2004/2005 con Menorca Bàsquet, alcanzando dos campañas después (2006/2007) su segundo hito con Climalia León. A partir de ahí, en la 2009/2010 y 2011/2012 caerían el tercer y cuarto ascenso, cerrando el círculo con los menorquines. Su quinto y último ascenso lo lograba de la mano de Palencia Basket en la 2015/2016. En los diferentes rankings sus letras están grabadas a fuego, copando la cima en varias facetas: es LÍDER EN PARTIDOS JUGADOS (542), habiendo batido a todas las leyendas que le precedían, y también en REBOTES TOTALES CAPTURADOS (2.752, aunque Óliver Arteaga quizás lo bata pronto). Además, figura en el TOP10 de puntos anotados (3º con 4.832). No es casualidad que fuera elegido por los aficionados como el jugador favorito de toda la historia de la LEB Oro, en una encuesta llevada a cabo por nuestro reputado compañero y experto en LEB Oro Ramón Juan. Simplemente Urko Otegi.
Richi Guillén
11 temporadas en Oro
353 partidos, 10.713 minutos, 5.927 puntos, 2.399 rebotes, 7.352 créditos de valoración
Hablar de Richi Guillén es hablar de un jugador que marcó una época en la liga. La excelencia. Si bien no disputó tantas campañas como otros protagonistas de esta pieza, todo lo conseguido por el ala-pívot tinerfeño en sus 11 temporadas LEB Oro hace que se cuele en esta selecto TOP5. Una carrera deportiva larga, excelsa y muy meritoria. Un interior todo clase a raudales y cuyos fundamentos técnicos en este deporte eran muy elevados, para delicia de todos los que compartieron vestuario con él e incluso lo sufrían como rivales. Estoy seguro que durante su etapa en la liga no dejó indiferente a nadie. Sus primeros pasos los dio en Algeciras durante la 2004/2005 y desde muy pronto pudimos comprobar que no era uno más y que su calidad sobresalía sobre el resto, con gran capacidad anotadora y aportando en varias facetas del juego. Los Barrios y, sobre todo, Ciudad de La Laguna fueron los equipos donde más huella dejó (disputando tres temporadas completas en cada conjunto). En tierras canarias disfrutamos de sus mejores años. A nivel individual sólo tocó la gloria de vivir un ascenso una vez (un ascenso a la ACB con Iberostar Canarias y Copa Príncipe incluida en la 2011/2012). Acumula nada más y nada menos que 4 galardones de MVP en su estancia en la LEB Oro: el primero, en su debut con Algeciras (2004/2005); dos temporadas más tarde llegaría el segundo (2006/2007, Los Barrios); después en la 2010/2011 con Canarias y el último en la 2014/2015 con Clínicas Rincón. En los diferentes rankings, con echar un pequeño vistazo nos daremos cuenta de su impacto: LÍDER ANOTADOR de la historia de la liga (5.927), sacando más de 1.000 al segundo, también aparece en el TOP10 de rebotes totales capturados (2.399) y en el TOP10 de mayor valoración en un partido (10º con 51 créditos en 2014 con Clínicas Rincón). Leyenda absoluta. Destaco sus 16.8 puntos de media en esos 353 partidos disputados. Ahí es nada.
Miki Feliu
16 temporadas en Oro
530 partidos, 12.353 minutos, 3.836 puntos, 1.844 rebotes, 3.906 créditos de valoración
El alero manresano ha sido el último en decirnos adiós con su reciente retirada, pero sin duda ha dejado una gran huella. Dieciséis han sido las temporadas que hemos podido disfrutarlo en la liga, desde que comenzara allá por la 2005/2006 con L’Hospitalet. De hecho es de los jugadores retirados que más campañas ha jugado (igualado con Jorge García Navea). No cabe duda que dentro de su dilatada trayectoria hay que destacar una estancia muy importante en su carrera, y esa no es otra que la de Força Lleida. En el club ilerdense ha ejercido de gran capitán, disputando seis temporadas completas en dos etapas (las cinco últimas de manera consecutiva); si vemos su trayectoria entera serían siete campañas en tierras lleidatàs, unidas a su temporada 2011/2012 en el extinto club ilerdense Lleida Basquetbol. Un referente y muy querido entre la afición del Barris Nord. A nivel individual, tres han sido los ascensos que ha cosechado el catalán a la ACB. El primero llegó de la mano de Ricoh Manresa en la 2006/2007, antes de hacer lo propio con Obradoiro en la 2010/2011 y el último en la 2014/2015 con Tizona. En los diferentes rankings también ha dejado su impronta. Sin ir más lejos, es el segundo jugador, solo por detrás de Urko Otegi, con más partidos jugados (530 encuentros), quedándose a tan sólo 12 partidos del que fuera su compañero en Palencia. También figura en el TOP10 de rebotes totales capturados (6º con 1.844) y en el TOP10 de triples anotados (4º con 599), quedándose muy cerca del podio (apenas 16 triples).
Julio González
14 temporadas en Oro
473 partidos, 11.394 minutos, 4.241 puntos, 1.595 rebotes, 4.208 créditos de valoración
El alero asturiano es uno de los jugadores más reputados y que más caló entre los aficionados de la liga durante sus 14 temporadas jugadas. Prácticamente no tiene palmarés en cuanto a títulos, pero su aportación fue más allá. Ya despuntaba de pequeño y es uno de los júnior de oro que formaba parte de aquella histórica selección júnior que conquistó la medalla de oro en el Mundial de Lisboa compartiendo equipo con los Pau Gasol, Juan Carlos Navarro, Felipe Reyes y compañía. Su carrera ha estado muy vinculada al baloncesto leonés en diferentes etapas. Pudimos disfrutar de sus primeros pasos en la categoría durante la 2000/2001 y, como decía, al hablar de Julio González nos vienen a la cabeza automáticamente las tierras leonesas. En León disputó seis temporadas completas con el extinto Baloncesto León, siendo un referente. Los Barrios, Tenerife y Ourense fueron otros destinos muy marcados en su carrera. A nivel individual, el de Navia seguro que se quedó con la espinita de lograr al menos 1 ascenso a la ACB, pero no fue posible. Ello no es impedimento para que nos demos cuenta de su importancia en los rankings: sexto jugador en número de partidos jugados (473), figura en el TOP10 de puntos totales (9º con 4.241) y está cerca del TOP10 en rebotes capturados.